Vino para principiantes, guía para elegir el adecuado

Cada vez son más las personas que se animan a adentrarse en el mundo del vino, puede parecer un proceso de iniciación complicado, por esa razón hoy queremos traeros esta breve guía de vino para principiantes. Para comenzar es importante conocer y saber diferenciar los distintos tipos de vino, basándonos en una serie de factores que vamos a mostraros. ¿Quieres convertirte en un experto? Es un proceso que lleva su tiempo, pero que poco a poco, investigando, interesándose y degustando se consigue. Esto es solo el comienzo, ¡vamos allá!

Aspectos a tener en cuenta para elegir un vino para principiantes

Para poder elegir el vino adecuado para cada ocasión es imprescindible tener en cuenta una serie de factores, los cuales definiremos a continuación:

• En primer lugar, hay que plantearse para qué es el vino, es decir, la situación en la que se va a disfrutar. No es lo mismo un vino para una reunión informal que un vino para una comida o cena. Si buscas un vino para una quedada con amigos, una tarde de juegos, una charla o cualquier otra situación informal, lo mejor es optar por un vino ligero. En este sentido, los vinos rosados siempre son una buena elección, aunque todo depende de los gustos de los invitados. En el segundo caso, es decir, a la hora de elegir un vino para una comida o una cena, lo principal es saber en qué momento del banquete se va a degustar, puesto que cada uno tiene su papel. Para los entrantes, el que mejor encaja es un vino blanco o un vino rosado; un vino tinto siempre es idóneo para continuar con el plato principal; mientras que, para los postres, siempre viene bien un vino dulce. Si lo que buscas es un vino para brindar, la mejor opción es un espumoso.

• También es imprescindible tener en cuenta la época del año a la hora de elegir el vino adecuado. En verano, lo que más suele apetecer es un vino fresco, por lo que se suele recomendar uno blanco o rosado, o incluso un vino espumoso, ya que además las comidas suelen ser también menos pesadas y estos tipos de vino encajan mejor.

• La graduación alcohólica del vino es otro aspecto importante a tener en cuenta, no solo por cómo esto puede afectarnos, sino también porque es un factor que junto con la acidez y el tanino nos transmiten el cuerpo del vino. El alcohol aporta carácter; la acidez, la frescura y, el tanino, la estructura. Si un vino tiene alcohol, acidez y tanino será un vino con potencial de guarda.
  • La graduación alcohólica puede variar en función del tipo de vino, del siguiente modo: 
    • Los vinos de cuerpo ligero son aquellos que se encuentran entre 10º y 12º. Suelen ser los vinos blancos o rosados.
    • Los vinos de cuerpo medio son aquellos vinos, normalmente tintos, con grado entre 12º y 14º.
    • Y los vinos con cuerpo más intenso, son aquellos que tienen más de 14º, pueden ser tintos, dulces o fortificados.

Información del origen del vino que se puede extraer de la etiqueta.

Además de todos los aspectos previamente mencionados, también hay que aprender a leer la etiqueta de un vino, con el fin de obtener otro tipo de información y empezar a conocer las distintas variedades y a distinguirlas. De la etiqueta podemos conocer la marca o nombre del vino; su procedencia, si está vinculado a alguna denominación de origen, tipo y añada del vino, variedad de uva, grado alcohólico, y, por supuesto el nombre de la bodega.

• Denominaciones de Origen: se trata de una zona geográfica que ha sido reconocida de manera administrativa con el fin de establecer una designación conjunta a aquellos vinos que cumplen una serie de características comunes. En total, en España hay unas 70 Denominaciones de Origen establecidas, algunas conocidas como La Mancha, Rioja, Rueda o Ribera de Duero y otras más pequeñas como Tierra de León o Vinos de Madrid.

• Tipos de uvas: Al hablar de vino, tenemos que familiarizarnos con los nombres de las distintas variedades de uvas blancas y tintas. Dependiendo de las condiciones climáticas o del suelo de las distintas regiones, se adaptarán mejor unas uvas u otras. Ejemplo de uvas blancas más conocidas son: la albariño en Rías Baixas; la verdejo en Rueda y la viura en Rioja y Mancha. En tinto, la tempranillo que recibe diferentes nombres según la región como cencibel, tinta del país o Ull de Llebre.

• El tipo o categoría del vino es otro de los aspectos imprescindibles a tener en cuenta. Y es que, dependiendo de ladenominación de origen, los vinos pueden diferenciarse por el tiempo de envejecimiento en barrica o en botella. La clasificación tradicional más conocida sería: vinos jóvenes, aquellos que no tienen tiempo de barrica; crianzas, reservas o grandes reservas, que llevarán un período de crianza, menor o mayor, entre barrica y botella. A mayor categoría, más cuerpo y mayor capacidad de guarda. Aquellos que no lleven descrito la categoría del vino, normalmente, tendrán una breve descripción de la variedad de uva y envejecimiento que haya pasado este vino en su contra etiqueta.

• Por último, podemos prestar atención al tamaño de la botella. El más común, y el que más se suele utilizar tanto en reuniones informales como en eventos especiales, es el de botellas de 75 cl. Ahora bien, existen otras opciones de mayor tamaño, ideales para eventos o celebraciones con más comensales, o bien para realizar algún regalo especial a wine lovers. Además, este tipo de botellas se conservan mejor, por lo que es un acierto seguro. Entre los tamaños más grandes encontramos:
  • Botella Magnum, de 1,5 litros.
  • Botella Jeroboam, de 3 litros.
  • Botella Réhoboam, de 4,5 litros.
  • Botella Mathusalem, de 6 litros.
  • Botella Salmanazar, de 9 litros.
  • Botella Balthazar, de 12 litros.
  • Botella Nabuchodonosor, de 15 litros.
  • Botella Melchior o Salomon, de 18 litros.

Esto es tan solo una breve guía de vino para principiantes, pero la clave está en probar, investigar, interesarse y conocer, para así aprender y disfrutar de un buen vino.