En ocasiones los viticultores, los bodegueros, damos por hecho nociones que, sin embargo, es lógico que despierten dudas entre los consumidores. En la actualidad, varias regiones vitícolas españolas, y de forma incipiente en Rioja, están debatiendo la posibilidad de diferenciar los vinos en función de los terruños y pueden escucharse términos como vinos de pueblo, vino de finca, de parcela, de paraje…
Priorato, junto con Rioja las únicas denominaciones de origen calificadas del país, ha sido pionera en el desarrollo de los llamados ‘Vinos de Villa’, que van más allá de las subzonas y que, con una demarcación de una docena de comarcas en función de suelos, climas y tradición, aportan una mayor garantía sobre la procedencia de la producción. Además de las Villas, Priorato ha desarrollado también los ‘Vinos de Finca’, cuyos nombres están vinculados a de los viñedos de los que se obtienen y que les dan una características especiales.
Familia Martínez Bujanda, integrada con Finca Valpiedra (Rioja) en la Asociación Grandes Pagos de España, trabaja con estos conceptos vinculados a los terruños auténticos en prácticamente todas sus elaboraciones. Finca Valpiedra y Cantos de Valpiedra (D.O. Rioja), Finca Montepedroso (D.O. Rueda), así como el crianza y el Ciclos de Finca Antigua (D.O. La Mancha) serían, además de vinos de villa, de municipio o de pueblo, vinos de finca porque todas las uvas proceden del entorno natural donde las cultivamos.
Familia Martínez Bujanda trabaja con terruños auténticos diferenciales del entorno más próximo, con rendimientos notablemente por debajo del conjunto de la denominación de origen y con unas prácticas vitícolas auténticas y sostenibles que también proporcionan un carácter único a nuestras elaboraciones. La última pretensión es caracterizar con nuestros vinos el paisaje que envuelve nuestros viñedos, incluidos los riesgos de someterse al dictado de la madre Naturaleza: los vinos de Familia Martínez Bujanda cambian cada año como lo hace el propio clima e incluso, cuando las condiciones no son las adecuadas para la elaboración de determinados vinos, la añada queda en blanco como sucedió en 2013 con Finca Valpiedra. Es decir, el auténtico elaborador de finca no tiene ‘plan b’.
Los varietales de Finca Antigua van un paso más allá y cada vino procede de un pago específico, por lo que estamos ante una colección de vinos de parcela.
Este concepto de viticultura llevado al extremo lo representa en Finca Antigua nuestro gran vino Clavis, elaborado exclusivamente con las uvas de la parcela Pico Garbanzo, apenas cuatro hectáreas hincadas sobre un atípico en la zona suelo arcillo calcáreo y con un ramillete de variedades plantadas de forma desordenada (garnacha, cabernet, pinot noir, mazuelo…) que se desarrollan en condiciones extremas, con temperaturas de 35 grados en verano y de 15 bajo cero en invierno. Clavis ‘morirá’ cuando lo hagan las propias cepas, sometidas año tras año a un importante estrés por las condiciones extremas de la parcela, sencillamente porque no hay ni habrá replantaciones para respetar al máximo un terruño diferencial como éste.
Balsámico e intensamente aromático es un vino que aconsejamos disfrutar de forma pausada y relajada, por su continua evolución cambiante en la copa, la actual añada en el mercado (2006) ofrece ya un vino completamente redondo, que también podrá disfrutarse con el paso de los años por su gran capacidad de guarda.
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